martes, 14 de junio de 2011

Hace 25 años el Bibliotecario de Babel se perdió para siempre en el Laberinto

Un día como hoy hace 25 años Jorge Luís Borges, de 85 años, el hombre del que se dijo que había metido el Universo en una caja de cerillas, expiraba.

Tras de sí dejaba más de una veintena de libros publicados; entre ellos varios fueron de poemas, otros de ensayos, pero los que le otorgaron fama mundial fueron si duda los libros de relatos. Puede decirse que Borges llegó a la narración breve de modo tardío. De joven pretendió ser poeta y quiso exhibir su vasta erudición en breves libros de ensayos en los que hablaba de lo divino y de lo humano. En ellos muestra un estilo ampuloso, barroco y pedante del que después renegaría. En 1938 ,un época en que su escritura ya se había vuelto más concisa y clara publicó  Historia Universal de la Infamia, una reescritura de diversos relatos y leyendas procedentes del Japón, las Mil y Una Noches, las obras de Swedenborg etc. 

En los años 40 , acaso los de su mayor creatividad, publicó Ficciones, que en realidad compila dos libros de relatos, y a finales de la década El Aleph considerada por muchos como su obra maestra. La narraciones de estos  libros son el mayor logro de la literatura fantática en legua española, una fantasía llena de paradojas, que trata de explicar la Eternidad y el Infinito y también llenas de hechos legendarios y misterios. En ésta época también publicó bajo un pesudónimo otros libros con su pupilo y amigo, Adolfo Bioy Casares.

En los años 50, Borges queda totalemente ciego a causa de una enfermedad congénita y un accidente que la aceleró. En su ceguera, el escritor de sumerge en la poesía que, en su situación, le resultaba más facil de componer.

Los 60 coincide con las traducciones de sus principales obras y su difusión internacional. Borges se convierte en una figura de renombre y en el escritor más famoso de Argentina.

En la década siguiente vuelve al relato con el Informe Brodie y el Libro de la Arena. En 1982 ven la luz sus útimos relatos recopilados bajo el nombre de La Memoria de Shakespeare.

Siempre polémico, colmado de todos los premios existentes(excepto el Nobel) y universalmente reconocido y respetado incluso por sus rivales el sabio argentino fue alcanzado por la muerte(o él la agarró de la mano) el 14 de junio de 1986.El suceso, de todos modos, no tuvo la menor importancia porque por esos días Maradona hacía vibrar a los argentinos valiéndose de la mano de Diós( una verdadera lástima que Borges no pudiera comentar esta epifanía albiceleste).

Cómo recibió la Providencia la llegada de Borges es desconocido. Seguramente Borges preguntaría si otros Borges llegaron antes que él, si sus pensamientos eran eternos y habían sido eternamente previstos antes de que él mismo los pensara, si sus libros, o mejor dichos, todos los libros que leyó, escribió o imaginó estaban en la mente eterna de Diós, si el mundo al que llegaba era el verdadero como había predicado Basilíades o si el Paraíso y el Infierno no eran ni un premio o ni una recompensa como escribió Swedenborg. Creémos que Diós y los ángeles presentes le darían una educada excusa y se irían a tomar un café. Borges se iría a buscar una Biblioteca, a poder ser con forma de laberinto, pues siempre declaró que esa era la forma que para él tenía el Paraíso.

 Éste es mi tributo personal aunque monótono y lleno de errores. Espero sinceramente que Jorge Luís Borges descanse en paz a pesar del todo el jaleo de los homenajes que hoy se le dedican y de la bruja de su viuda.

Os dejo con su palabra que para un ciego valdrá más que mil  imagenes.


lunes, 13 de junio de 2011

Saludos desde la Biblioteca

Mañana se cumplen 25 años de la muerte de Jorge Luis Borges, el magistral escritor argentino. Desde hace un tiempo tenía planeado homenajearle de algún modo. No era ésta la manera que tenía en mente pero es la única que está a mi alcance por el momento.

En las próximas entradas querría introducir a los futuros lectores(si es que llego a tenerlos) en la vida, la obra y el pensamiento del escritor porteño; su rico mundo literario e intelectual formado por la mística, la filosofía, los misterios sin resolver, las paradojas irresolubles, la cábala, las mil y una noches y un sin fin más de temas que iré compartiendo con vosotros.

Por hoy, y en vísperas del aniversario de su muerte os dejo con uno de sus poemas:


YO

La calavera, el corazón secreto,
Los caminos de sangre que no veo
Los túneles del sueño, ese Proteo
La vísceras la nuca, el esqueleto
Soy esas cosas, increíblemente
Soy también la memoria de una espada
Y la de un solitario sol poniente
Que se dispersa en oro, en sombra, en nada
Soy el que ve las proas desde el puerto;
Soy los contados libros, los contados
Grabados por el tiempo fatigados;
Soy el que envidia a los que ya se han muerto.
Más raro es ser el hombre que entrelaza
Palabras en un cuarto de una casa.